jueves, 25 de octubre de 2012

¡Con ánimos!

Si es que mis cambios de ánimo no hay quien los estienda.

Me siento gorda. Me veo gorda. Sé que estoy gorda. He cogido tres kilos, peso 64kg después de la visita a mis padres pero DA IGUAL.

Porque tengo fuerzas para ponerme en serio, por que hablar con mis amigas y sus ánimos a mejorar mi salud me alientan a seguir.

Y espero que esta determinación me dure, que me conozco y me derrumbo fácilmente.

Pero si fui capaz de perder casi 50kilos yo sola una vez. ¿Qué son 10kilos para mi ahora?  NADA.

¡Yo puedo con eso y más!

martes, 16 de octubre de 2012

De por vida.

De por vida.

Y aún después de varios días desde mi cita con el médico le sigo dando vueltas a esas palabras.

He estado un poco desaparecida por circunstancias personales. Mi familia está apunto de perder a dos miembros por salud y eso me ha tenido algo apartada de todo esto, pero la presión de la comida tampoco me ha dejado estos días.

He cogido dos kilos en mi ausencias, gracias a los descontroles en los horarios de las comidas y la ayuda de mi madre con un "come, niña, que te estas quedando en los huesos". ¡¿Qué huesos?! Si lo único que tengo son kilos de grasa pegados a mi culo.

Ya que volví a mi ciudad unos días, aproveché para visitar a mi médico y comentarle mis problemas a la hora de ir al baño. Me siento siempre muy, muy hinchada y si no es con laxantes me puedo pasar una semana entera sin visitar el wc. Eso implica que coja volumen y no pierda peso. Y ya que estaba allí me pesó, midió y me hizo un reconocimiento. Según él estoy muy bien, no necesito perder más peso pero....tampoco puedo dejar de hacer dieta.

Y es que hablando con él sobre mi hipotiroidismo y mis problemas para mantenerme en un peso estable me sentenció a lo que será una dieta de por vida. Palabras textuales de mi médico es que no voy a poder dejar nunca una dieta si quiero mantener una talla normal, ya que cualquier cosa que haga para tener una alimentación "normal" de 2000 calorías o las que correspondan, lo único que hará será engordarme cuando a una personal normal sin mi enfermedad le serviría para mantener su peso.

Con esto llego a la conclusión de que nunca voy a poder quitarme el miedo y la sombra de coger peso de encima. Que mi cuerpo necesita unas 1200 calorías solo para no engordar y que si quiero perder peso voy a tener que comer 800 o menos calorías. De por vida. Para siempre. Hasta que me muera.

¿Y ahora que hago yo? Le prometí a mi novio comer bien, comer sano, intentar olvidarme de Ana y los problemas que estaba trayendo a nuestra relación. Que pediría ayuda y que no me dejaría llevar de nuevo a un día de tan solo 300 o 500 calorías. ¿Voy a tener que romper mi promesa? ¿Cómo le digo a mi novio que, si quiere verme como estoy ahora o con un par de kilos menos, tendré que renunciar a salir con él a tomar una tapa o cenar juntos en casa como hacíamos antes?

Estos días he procurado comer sano, pese a los descontroles. Verduras al horno, carne a la planchar, no tocar el pan ni el azúcar...Y si solo con eso he cogido peso, ¿qué pasará si un día decido salir con mi chico a tomar un batido?

Es horrible.

Es horrible que tenga que pasar el resto de mi existencia llevando esta cruz.

Yo puedo soportar mi propias imposiciones, dejar de comer cuando yo quiero o racionarme como mejor veo. Pero me canso. Me agoto. Contar las calorías de hasta el té que me tomo por las mañanas está empezando a matarme.

Algunas os reiréis diciendo que solo soy una gorda quejandose. No soy gorda porque quiero. No me quejo por que quiero. Simplemente soy una enferma que no ve solución ninguna salvo un camino de tortura por delante.

¿Y si dejo todo y lo mando a la mierda? ¿Y si vuelvo a comer como una personal normal?

Podría. Pero con ello no solo cogería peso. Volvería a tener problemas de corazón, respiratorios, mi tiroides se dispararía y podría terminar con bocio o peor.

¿Qué mierda hago yo ahora?

Mi mejor amiga, está saliendo de la anorexia, y me dijo hace poco que no fuera tonta y que disfrutara de la vida. Que no cometiera su error.

Lo que no sé es como hacerlo.